Me gustan las películas de guerra
Sunday, 23 de July de 2017 por Ramón
Sé que queda mal decirlo: me gustan las películas de guerra. Sufro en ellas, me dejan un poso de tristeza. El sábado vi Dunkerque (Dunkirk) desde la segunda fila del cine Princesa de Madrid y ahí sigo, varado en espera de un rescate, de un boca a boca. Hay películas que no se deben ver solo.
Es muy buena, emocionante. Centra su mirada en los pequeños héroes, evita regodearse en las imágenes de los muertos y los heridos cuando Dunkerque fue una carnicería. La guerra siempre lo es, una carnicería física y ética de la no se puede volver sano.
Está a la altura de las mejores del género. No es la primera media hora trepidante de Salvar al soldado Ryan, lo que hubiera filmado Robert Capa aquel Día D en Omaha si hubiera tenido una cámara de vídeo. Tampoco la sagrienta e inmensa Black Hawk Derribado de la que no me puedo sacar la música de la cabeza, también de Hans Zimmer.
En la película de Chistopher Nolan, la guerra no es el centro. Su tesis es la supervivencia, la vida. Se mueve en tres planos: tierra, mar y aire durante tres tiempos diferentes.
Dunkerque fue un desastre militar británico. Lo heroico estuvo en la implicación de miles de civiles en el salvamento de más de sus más de 300.000 soldados. Estaba en juego el resto de la guerra.
Mi madre es británica, tiene 93 años y una memoria en avería. Esta es una de sus historias circulares. Cada vez que la cuenta se emociona.
No queda mal estimado Ramon, te gusta el buen cine, además con la experiencia de sufrir la guerra en bicicleta como tú la sufrías enfrentándote todos los días a la incertidumbre. No compa, es lógico que te guste el buen cine de guerra. Un abrazo.
Con tu adn histórico me resulta muy atrevido ocupar una segunda fila… yo no tuve más aproximación que la de Hazañas Bélicas, pero desde luego me hicieron pacifista.
Si una película te produce emoción, te altera los sentimientos, te deja impactado y además la estética y la técnica son de calidad y las sabes valorar y disfrutar, has conseguido por muy poco precio tener una experiencia humana gratificante. Y se agradece tu comentario para percibir cómo podemos reaccionar ante la misma historia.