Corrupciones Sociedad Ilimitada
Tuesday, 4 de November de 2014 por Ramón
En medio de la tempestad, cuando es aconsejable extremar la pose, por el qué votarán, el ministro de Interior, el no siempre pío Fernández, otorgó el tercer grado a Jaume Matas. Lo hizo en contra del criterio penitenciario. Manda la amistad, quizá el pacto de la simulación de que la ley es igual para todos. ¡Qué desvergüenza! Ha pasado 95 días en prisión, la mayoría de ellos con tratamiento vip. El PSOE lo llama “indulto encubierto”. Primera conclusión del caso: robar merece la pena.
La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo (PP), doblemente imputada como presunta choriza, pasea su caradura, que es mucha, en actos institucionales sin que nadie la detenga, sin que piten los detectores de decencia. José Luis Olivas, estafador de preferentistas, sigue en libertad con el pío pío que yo no he sido. Cospedal, que tiene su presunto en casa, afirma que ya no pueden hacer más.
Y sube el paro por tercer mes consecutivo y la UE nos rebaja la cuenta de la vieja. El cuento de la recuperación se tambalea.
El problema está en la sociedad que lo consiente, en nosotros. Vi Salvados el domingo y siento envidia de Dinamarca. No son solo las leyes, es el pacto ético social el que determina lo que es intolerable. No es una cuestión de cantidad, sino de actitud. Comprar un toblerone con la tarjeta de crédito oficial es suficiente para que un político tenga que irse a su casa. Fue el caso de Mona Sahlin en Suecia.
¿Cómo conseguir ese pacto ético? Primero habría que cambiar de políticos y de políticas. Habría que poner patas arriba la Educación para generar ciudadanos críticos e intolerantes hacia la corrupción y la mentira.
Mientras llegan esos nuevos ciudadanos habría que potenciar el trabajo de la Fiscalía General del Estado, dotarla la independencia y medios técnicos, económicos y humanos, igual que a las unidades policiales que tan buen trabajo hacen a contracorriente política: la Unidad de Delitos Fiscales y Económicos (UDEF) de la Policía Nacional y la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. También es urgente una ley de transparencia radical, en la que cualquier ciudadano pueda rastrear hasta el último euro de gasto público.
Lo dijo Caemen Calvo, ministra del PSOE: “Estamos manejando dinero público, y el dinero público no es de nadie”. Es de una ignorancia delicitva, la base de lo que pasa. Peor es lo de los Matas, Granados, Bárcenas, sedes en negro, Ratos, Blesas y un interminable etcétera que han corregido la frase en beneficio propio: el dinero público es que de quién lo manga mejor. Tengo ganas de votar.
España da vergüenza, Ramón.
Tenemos en este país una tarea colosal por hacer y a muy largo plazo. No sé si seremos capaces. Los encargados de esta tarea quizás no han sido educados para eso. Somos gentes que nos gusta crecer en cantidad y no en calidad. Yo creo que esta decadencia nos perseguirá por mucho tiempo que pase y que los cambios que puedan hacerse si hay voluntad y acuerdo serán un poco a la española.
Nunca seremos como los daneses, al menos en ese aspecto y desde luego en muchos otros. Vivo en un pueblo pequeño y a mi hermano ya le han “robado” tres veces en dos años su paragüas en el Casino, casualmente el que queda o dejan en lugar del suyo es uno viejo, roto y anticuado. Está claro por tanto que no es la confusión tìpica de que los paragüas de hombre son muy parecidos. Es esa picardía imbécil que no lleva a ningún lado porque si yo veo el paragüas, objeto del ultimo robo, por la calle lo reconozco de lejos. Luego es muy posible que el que lo tiene no se atreva a usarlo cuando llueve.
Así de estúpidos somos. Nunca seremos como los daneses ni en la intolerancia a la corrupción ni en otros tics de la vida diaria.
Conclusión: Mi hermano tiene una variedad de paragüas para cada ocasión o paragüero de destino. Uno, gris claro (imposible confundir, no los llevan a sí los abuelos) . Otro con un mango negro muy guapo mate pero con un símbolo de marca azulón pequeño tanto en el mango como en la tela, etc.etc.
Y además los compro baratos y por internet. Pero siempre habrá alguien que le apetezca tener lo ajeno sólo porque sí, eso debe dar un subidón de ego. Joder por joder sin más fundamento. Al igual que hacen los altos cargos, les sobra dinero por las orejas y han de recurrir a la black para gilipolleces. La Miseria es la marca España.
Patricio.
Este es un País de pícaros y ladrones (también de buena gente).
Nuestros políticos no nacieron del aire aunque muchísimos son peores que las personas a quienes representan. La impunidad campea por la península desde La Coruña hasta Almería.
Y para llegar a ser tan ” éticos y legales ” como los daneses va hacer falta ,por lo menos, unos cuantos años de EDUCACION PARA LA CIUDADANIA , eliminada de la enseñanza por nuestro mediocre ministro de educación.
Por cierto muy interesante tu artículo sobre Desesperanza Aguirre.
Esto cada vez da mas asco, lo de Matas y lo de Cospedal sin contestar al auto judicial del pago en negro de la sede (buena pregunta de Carlos Cue creo) ya es lo penultimo porque seguro que mañana habra otra más.
No se si PODEMOS traerá un regimen bolivariano o lo que sea, pero con tal de poder a echar a toda esa chusma de una vez votaría lo que sea.
Ahora entiendo el auge de todo tipo de formaciones porque yo lo que quiero es que se vayan de una puñetera vez, porque además es que estoy seguro que en esas reuniones,cenas, reservados, palcos se ríen a carcajadas de nosotros.
Regimen bolivariano dicen, una guillotina ponía yo.
PS: Estoy con Ana, grande tu artículo sobre E. Aguirre
Este comentario quizás no tenga que ver con tu último blog, o quizás sí. Titular en ELPAIS.com hoy: “REPSOL mejora un 28% su beneficio pese a la caída del petróleo”.
Precio del barril brent el 08/11/2011 116,15$, precio del barril brent el 06/11/2014 82,43$ (fuente cincodias.com) Diferencia -29%. Precio del litro de gasoil el 08/11/2011 1,367€, precio del litro de gasoil el 06/11/2014 1,344€ (fuente dieselgasolina.com) Diferencia -2%.
Otra muestra de como nos sangran y que pasa desapercibida entre tanta mierda de corrupción y corruptos.
Dónde está la famosa oda a los mercados, esa que dice, que se autorregulan.
Pablo