Compañías animales
Friday, 2 de September de 2011 por Ramón
Viernes. M está ingresada en una clínica veterinaria del sur. No sé si es cansancio de vivir, remar hacia la orilla tras numerosas tormentas o simple rebeldía. Tiene 14 años y medio y la vida colgada de un hilo, un hilo fuerte que se debilita por una infección de útero. Su mirada triste, de ser vivo que se deja ir, que se duele de respirar y latir, de estar, me ha recordado a mis gatos, Oliverio y Claudio, nombres romanos y nobles en justa e íntima venganza a la mala costumbre de los muy ricos de bautizarse con pomposidad y largura para terminar llamándose como animales de compañía: Pitita, Cuqui, Chichi…
La situación de M me ha recordado la tristeza profunda que generan las ausencias animales. No es solo su falta física, también falta su generosidad, entrega, honestidad, amistad en una sociedad enmierdada, egoísta, ruin, repleta de nuevos ricos con deuda, prometedetodos y gentes sin memoria. No es tiempo aún de necrológicas; aún queda ese hilo. Pero sí es tiempo de música.
Feliz fin de semana.
Muchas gracias Ramón, muchas veces pienso que los animales y la niñez es lo único que dignifica la existencia, tu periodismo también dignifica el que yo estudio.
Una vez más, gracias.
las mascotas y Pink Floyd …buena unión
buen fin de semana!!!
los perros, los unicos que te dan cariño sin condiciones. pobre M. tengo perra, pero no soy su dueño, compartimos el espacio. es vieja, paro no tanto como M. Su cariño es incondicional, solo me pide unas caricias, tumbarse a mi lado, pero no exige nada. NO creo que M esté cansada de remar, ni haya enfermado por ¿rebeldía?…simplemente está enferma, y hay que hacer todo lo posible por ayudarla.
Mi perra, un husky siberiano de 11 años, también pende de ese fino hilo. En junio le diagnosticaron un cáncer de hígado. El corazón se me paró y un extraño nudo agarró mi voz para no dejarla escapar… y mis ojos empezaron a ver mal por tanta lluvia. Tengo 22 años, 11 de ellos los pasé con ella al lado. Imaginaros, la pre.adolescencia, la época más rebelde, mi juventud… todo. No tuve amiga más fiel que ella en estos años difíciles y no puedo soportar que un día no muy lejano me deje hacer mi vida adulta, sola. Aún queda ese hilo, sí.
Buen fin de semana.
Que la memoria sea el mejor homenaje.
Un abrazo,
http://destelloshumanos.blogspot.com
Tristes palabras, cualquiera que ha convivido con un perro, sabe, aunque nunca se quiera admitir, se irán antes que nosotros, dejando tras de si, un cumulo de sentimientos mezclados entre la rabia de la perdida y la alegría de lo compartido con nuestro perro.