Táctica, estrategia y el del bombo
Saturday, 30 de January de 2016 por Ramón
Unos días antes de las elecciones presidenciales de 2004, entre John Kerry y George W. Bush, hicimos una porra en El País. Aposté por la victoria de Bush. Alguno me afeó el gesto, dijo que era impropio y poco consecuente con lo que defiendo. Respondí que una cosa es lo que quiero que pase y otra ganar la porra. Sucede algo parecido ahora, ante la posibilidad de un Gobierno progresista, reformista, de izquierda o como lo quieran llamar. Esta vez no hay porra pero no quiero confundir deseos con realidad.
Hace unas horas colgué este tuit:
“Que
@ahorapodemos apoye un gobierno@PSOE +@CiudadanosCs con una agenda regeneradora radical podría romper de una vez las trincheras. Veremos.
Ante algunas (pocas, la verdad) críticas vertidas desde la orilla pepera y unas cuantas (más) desde IU, Podemos o más allá, colgué este otro:
Me en el pensamiento único, sea de derechas, centro o izquierdas Revindico el derecho humano a decir chorradas
#PactosImposibles.
En este país se tiende a descalificar toda opinión que no concuerde milimétricamente con la nuestra. Tenemos tendencia a las verdades absolutas y rotundas, sin grietas.
Detesto las verdades absolutas, el pensamiento único, el prietas las filas, el que se mueve no sale en la foto y toda esa mierda antidemocrática. Creo en la libertad de expresión.
Seguimos con las mismas opciones
- Gobierno en minoría de Mariano Rajoy (122 + el comisionista) con las abstenciones de C’s y PSOE.
- Gran Coalición PP-PSOE (+C´s).
- Gobierno de Pedro Sánchez (89 + Patxi López) con Podemos + Compromís (69), IU (2) y PNV (6) = 167 y la obligada abstención o voto favorable de ERC (9) y Democràcia i Llibertat (8) porque en contra estarían PP (123) y C’s (40) = 163.
- Gobierno de Sánchez en minoría con apoyos exteriores de C’s y Podemos, o coalición PSOE + C´s con apoyo exterior de Podemos.
- Nuevas elecciones. Si se calcan los resultados de los bloques, escaño arriba, escaño abajo, entraríamos en un nuevo escenario, ya sin Rajoy. Regresarían las trompetas de la Gran Coalición.
Se acumulan las urgencias
Reducir la brecha económica (medidas contra la pobreza y la exclusión social, frenar los desahucios, cambiar la ley fiscal); derogar las leyes más dañinas del Gobierno del PP (la Mordaza, Educación y Laboral) y regenerar la vida política (lucha contra la corrupción, comisión de investigación, independencia judicial, medios para la UDEF y UCO). En este paquete están de acuerdo PSOE, Podemos, C´s, IU y PNV.
Si añadimos la reforma de la ley electoral, quizá el PSOE ponga trabas; si añadimos la reforma de la Constitución es necesario sumar al PP. También sería urgente dotar de fondos a la dependencia y a la Memoria Histórica, ambas tienen mucho que ver con la dignidad. No es mirar hacia el pasado, es construir una ética colectiva.
Las cábalas
La opción 4 es muy difícil, pero sería la más Borgen de todas. La 3 sería quedar en manos de dos partidos que juegan a la independencia unilateral exprés de Catalunya y que tratarán de debilitar a su mayor enemigo: Podemos en su versión En Comú Podem con Ada Colau. La 1 supondría premiar la corrupción sistémica y la 2 sería el suicidio acelerado del PSOE.
La opción 4 tendría la ventaja de romper las trincheras derecha-izquierda heredadas del franquismo y ofrecer la posibilidad de superar el debate y las consecuencias de la Guerra Civil. Ya sé que C’s tiene una posición contraria a la Memoria Histórica, pero ese tipo de diferencias son las que se deben negociar. C’s, que es derecha, aún por ver si es europea o un PP 2.0, tiene la oportunidad de demostrarlo.
Este año viene convulso en la economía con riesgos de otro crack y, además, Bruselas exige más recortes. No me gustaría que todo esto se lo coma un Gobierno de izquierdas cogido por la entrepierna por el soberanismo exprés. Sería la mejor receta para que el PP, es decir este PP, regrese al poder con otra mayoría absoluta.
Lean a Sun Tzu en El arte de la guerra. No conviene confundir táctica con estrategia, deseos con realidad, opciones a corto con opciones a largo. Este es un periodo interesante para aprender a hacer política. Los ciudadanos exigen un cambio en las personas, en el lenguaje y en las políticas. Un cambio ético.
De momento tenemos más teatrillo que política, y mucho hooligan en Twitter que no desmerecen a algunos tertulianos, ex presidentes y editorialistas. Es país va a morir de rotundidad. Un poco de grasia.
Como siempre, muy interesante.
Otra cosa es la sugerencia musical. Normalmente me encanta, pero es que no puedo con las chirigotas y su pretendida gracia. Cosa mia, lo siento.