Lo llaman regenación y no lo es
Wednesday, 2 de July de 2014 por Ramón
Lo más sorprendente de las presuntas ideas regeneradoras de Mariano Rajoy es que los medios de comunicación le compren el adjetivo, sobre todo el día en que el juez Ruz imputa al ex tesorero Lapuerta. El PP tiene un serio problema con sus tesoreros, la contabilidad B y la coincidencia de los ingresos y las concesiones de obras públicas. Pero la regeneración no va por ahí, ni por dimitir. Eso es para los alemanes e ingleses, esos aprendices de democracia. En España aguantamos los chaparrones que para eso nos hemos comprado el hombre del tiempo.
La ‘regeneración’ estrella consiste en cambiar las reglas de elección de alcaldes, para que sea elegido el cabeza de la lista más votada. El PP se aseguraría así el gobierno en 40 capitales y evitaría disgustos en Madrid y Valencia. El despropósito es tal que el PP podría arriesgarse a presentar a Ana Botella. Se trata de una cacicada a menos de un año de las elecciones municipales, cuente o no con el apoyo del PSOE o de lo que queda de Rubalcaba.
Una decisión así en medio del descrédito de las instituciones sería un órdago a la hartura ciudadana. Jugar con la paciencia colectiva es jugar con fuego. Si se quiere cambiar algo, cámbiese la ley electoral, no para modificar el número de los diputados en su beneficio como Cospedal, ni impedir coaliciones que ‘nos’ perjudican, sino para abrir las listas, como demanda la ciudadanía, e impedir el concurso de los imputados (en Valencia el PP tendría problemas para elaborar una lista).
Regeneración es suprimir la inmensa mayoría de los aforados: 2.000 políticos y 7.500 jueces y fiscales. Algo grave debe pasar en la justicia española para que tantos jueces y fiscales no se fíen de ella y se encomienden solo al Supremo, que es elegido por aforados.
Regeneración es dimir cuando se recibe dinero a espuertas de una red corrupta, sepas de donde viene el Jaguar o no lo sepas. Regenerar es abrir a la ciudadanía las cuentas de los partidos, prohibir las donaciones de empresas, mostrar las tripas de los concursos públicos. Regenerar es quitar privilegios a una clase política que olvidó lo esencial: son re-pre-sen-tan-tes de la supuesta soberanía popular. Regenerar es poner fin al saqueo. Regenerar es devolver a la ciudadanía la voz secuestrada.
Te vas a convertir en un periorrista para los voceros del reino.
Felicidades por la entrada. Una vez más, sublime.
Gracias por ser mi voz. Y desde luego no digo “amén” cuando dicen mierda! y me viene a la memoria otra que dice … “que no, que no, que no nos representan…” y eso que cobran de nosotros. Qué disloque!
Gracias por dar voz a lo que muchos pensamos.
El miedo a Podemos se está convirtiendo en pánico, temen que la justicia y la equidad lleguen a la sociedad. Nada más lejos de sus planteamientos. Maldita chusma.
No creen en eso de la soberania del pueblo y partiendo de aquí no van a hacer nada ni a tomar medidas que la tengan en cuenta. Es un entramado tal de favores y secretos, una red de redes, que por imposibilidad de desentrañarla, debería desaparecer. Pienso que Podemos debería asumir la responsabilidad urgente de luchar por cambiar la ley electoral, es lo que pedía el 15M y en eso no puede permitirse el lujo de dejarla a un lado. Sería la mejor manera de afianzarse. Eso, e intentar aguantar sin inmutarse la cantidad de barbaridades que sobre ellos caen y seguirán cayendo pertinazmente en forma de chaparrón diario.
[…] Los entendidos estiman que esta reforma beneficia claramente a los populares evitándoles la necesidad de pactos para mantener muchas alcaldías. ¿Pero es ese el debate ciudadano? ¿Es esa la regeneración que el ciudadano espera? […]