Zurrando a Jordi Évole
Monday, 24 de February de 2014 por Ramón
A Jordi Évole le llueven críticas y descalificaciones por su programa sobre el 23F llamado Operación Palace; también alabanzas, aunque menos. En Twitter aún se escucha el rasgar de las vestiduras de lo políticamente correcto. ¡Cómo es la Red cuando se vuelve turbamulta! ¡Cómo es este país en el que la mayoría se ofende por lo que creyó leer, no por lo que está escrito!
Es verdad: periodismo y ficción son antitéticos, como lo es la publicidad y la información, pero ahí tenemos a célebres comunicadores vendiendo bonanzas de bancos, con la que está cayendo, sin que nadie diga ni mu. Porque aquí nadie dice ni mu como solista, solo si hay coro que acompañe.
Si creemos en el periodismo sin adornos ni redondeos ni ficciones, es decir en el periodismo de hechos y comprobaciones, el único que me gusta, deberíamos escandalizarnos todos los días porque los ejemplos de periodismo basura son abundantes.
¿No es más escandaloso tragarse las versiones oficiales del Gobierno de turno o de sus imaginativos servicios de espionaje? ¿No lo es este corta y pega masivo de la ficción de los brotes verdes que nos quieren vender? ¿No es falsificar la realidad sentarse en una rueda de prensa sin preguntas y simular que es de verdad? ¿No lo es quedarse quieto, manso, en una sala de Génova 13 ante una televisión de plasma que simula la comparecencia de un presidente simulado? ¿No son más escandalosos los telediarios públicos, sean nacionales o autonómicos? ¿No genera peor periodismo ser sumiso con el poder político y con el económico? ¿Quién está libre para tirar esa piedra, o ese tuit? Yo no lo estoy. No puedo disparar.
Hubiera preferido un documental clásico sobre las sombras del 23F, pero me gusta la provocación de Évole: acercarnos el espejo para que nos miremos en él. Es el reflejo lo que nos debería escandalizar.
En este país tan falsamente circunspecto es bueno que los políticos que tanto criticamos se presten al juego, a romper el molde. Parece que hubo varios que se negaron. Les debió parecer más escandaloso simular una trama que cobrar una talegada cada mes, o cada consejo, de una eléctrica que ficciona en comandita con otras eléctricas un mercado libre en un Estado de Derecho.
Mientras escribo estas línas escucho a Esto sí que es una chirigota en su actuación en cuartos de final en el Carnaval de Cádiz. El pasadoble dedicado a la alcaldesa Teófila Martínez (minuto 8.27) no es ficción, son verdades como puños que no he leído en ningún medio de comunicación.
Gracias Évole. Gracias, Cadiz.
La manipulación política y mediática es el pan nuestro de cada día en España. Lo único que ha hecho Évole es ponerlo de relieve. Mientras sirva para reflexionar y reaccionar socialmente, me alegro. Nos ponemos puritanos pero la realidad española es muchísimo más grave. No he visto el programa pero lo veré en cuanto pueda. Acaso los medios no manipulan descaradamente? Si ha sido un montaje que ha provocado interrogantes, generar la duda ajena es bueno y la reacción del otro, más que bueno. En mi caso, pocas veces tengo tiempo para ver la tele. Siempre he preferido un libro!
Al final hay que reconocer que fué un gran revulsivo que nos trastocó mentalmente. A mí me parece que fué genial mostrar como se puede manipular al personal cuando algo está bien diseñado y presentado por personas, para nosotros creibles. Un puntazo. Al final hubo posiblemente más verdades de las que pensamos, quizás por eso ha molestado tanto. Hay que tener sentido del humor y valorar esa experiencia televisiva como original y “tocando” a políticos de todos los partidos, a la casa real, a los intocables militares, etc.
Entiendo lo que quieres decir, Ramón, pero esta vez creo que te equivocas. Lo que llamas “provocación de Évole” no me parece una provocación. No llega a tanto. Es tan solo una broma de mal gusto y una falta de respeto. Una más, porque de eso vamos sobrados. La nueva gran estrella de La Sexta (y por añadidura de Atresmedia, hasta el punto que ni el señor Maruhenda se ha atrevido a criticar a Évole) despertó unas expectativas que defraudó por completo y que nos dejó cara de tontos. No me gusta que me tomen el pelo. Quiero ser tratado con respeto. La misma falta de respeto veo en ese otro periodismo serio que criticas. Me falta al respeto quien convoca una ruda de prensa sin preguntas, nuestro presidente-plasma, los informativos de la 1 y de A3 y T5, etc, pero también la bromita de ayer de Évole. Por otra parte, si tenemos en cuenta que la hipótesis que maneja el falso documental no es nueva, no me parece descabellado pensar que la bromita de Évole no sea tan inocente como nos quieren hacer creer. Pudiera ser un falso “falso documental” con el objetivo de desactivar definitivamente esa hipótesis alternativa de lo que sucedió el 23f.
Y, José Luis, perdona, ¿por qué te parece una falta de respeto a tu persona? Es que se me escapa la personificación que haces de la ofensa. No es una pregunta irónica. Como no seas uno de los guardias civiles que tomó el Parlamento por asalto, no sé en qué te puede ofender. Máxime cuando al final Évole descubre la verdad del falso documental. Yo soy de los que estuvo con la boca abierta todo el programa y al final me retorcí de la risa. Me pareció fresco como formato y como idea.
Como espectador. Si te tratan como si fueses tonto no te respetan. Perdone que no me haga gracia que me traten como si fuese tonto. No necesito que venga Jordi Évole a recordarme la tele engaña y manipula. Por desgracia debo padecerlo a diario y soy perfectamente consciente de ello. Ayer Évole dijo en El intermedio que entendía el enfado de gente como yo. Menos mal que encima no me da lecciones de buen humor.
Por eso y por mucho más, paso por aquí, para constatar que somos más con ese pensamiento o formas de ver las cosas. Gracias otra vez.
Quien se ofendió y / o tenia grandes expectativas con el documental no sabía Jordi Évole utiliza siempre un formato de humor
Creo que en este caso tanto Jordi como La Sexta se aprovecharon del renombre alcanzado por “Salvados” para conseguir audiencia con un falso documental que de otra forma no habrían tenido. Dicho esto, hubieron múltiples referencias en las promos de que el programa no era un “Salvados” y además muchas de las cosas que sacaron indicaban lo falso del tema, la mayor baza del programa fueron sus ganchos. La mayoría de gente molesta es gente que se lo creyó y se han sentido engañados. En me opinión fue un programa entretenido que consigue que hablemos de lo que realmente pudo pasar en el 23-F y que tiene que hacer que la gente se plantee que no todo lo que sale en los medios de comunicación es la pura verdad.
Gracias, Lobo
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Es curioso como hubo politicos y periodistas que no se quisieron sumar por considerar que era una falta de respeto tomar el pelo a la gente. Sin embargo cuando desde sus periodicos o sus partidos y conferencias lo hacen no tienen reparo.
Quizas era pq si salia bien, la gloria era para Evole y si salia mal quedarian ellos tb señalados.
Me hubiera gustado no saber desde el principio que era falso, yo ya habia visto el Operacion Luna de kubrick y era facil de imaginar que esto era igual, para ver cual hubiera sido mi reacccion pero creo recordar que tp me cabree mucho cnd me engañaron durante el Operacion Luna.
PS: no eramos el pais de la risa y el buen humor, pues parece que los anglosajones tb nos han adelantado en esto, lo primero es reirse de uno mismo,vengan a Cadiz en cArnaval y lo veran.
Yo esta semana pasada la he acabado indignado, pero no por el programa de Evole (el que no se diera cuenta a los cinco minutos que los intervinientes no estaban contando algo desde su memoria sino leído en el prompter…..). Sino por otra cosa: “30.000 inmigrantes aguardan en marruecos para saltar a ceuta y melilla….” O este otro: “La exdirectora de Hacienda (de navarra) no ve corrupción en la consejera de economía” perpetrados por…….la razón? libertad digital? la gaceta? no! El País!!!
Cuando un dedos señala la luna y alguien solo ve el dedo, ese alguien, es un necio.
Da gusto respirar el aire fresco que inunda este patio…
Gracias Jordi por tu programa.
Sí, yo también me lo creí a pies juntillas, ùnicamente me preguntaba como fue posible que no hubiera saltado la liebre antes, tan dados como somos a “chivarnos”.
Me lo creí, pero no me ofendí cuando se descubrió el pastel. Aluciné sobre el poder de la manipulación.
Muy bien Jordi, andaré con más cuidado la próxima vez y mi enhorabuena por tu buen hacer.
Llego tarde, vaya. Hasta hace poco Evole, Buenefuente y berto me parecían tres clones, francamente: ni me entretenian ni me interesaban demasiado. Y a Evole tampoco le sigo mucho a día de hoy: no sabía ni que hubiera programa del 23f, ni que hubiera sido promocionado previamente. Pero me pilló en casa y lo vi. Al cabo de 10 min estaba claro de qué iba. Pero 2 reflexiones: el documental fake de la Luna se mofaba sobre un tema que está totalmente verificado aclarado y demostrable, de puro cierto que es; éste NO es el caso del 23f, donde todavía se nos niegan la principales claves del tema. Pero como aquí somos bobos, y nos creemos super graciosos, pues hacemos chorradas de este tipo. Y como segunda reflexión, y abundando en lo anterior, resulta que este año TaMpoco se ha hablado nada de lo que sucedió. …..porque todo el mundo ha estado hablando de la chorrada del Evole
Jordi Évole es genial, y sabe a caramelo mentolado.