A Santiago Rivera le han pirateado el personaje
Saturday, 28 de September de 2013 por Ramón
No es frecuente quedar con Jesucristo para escribir un reportaje. Ni que este fume tabaco de liar y beba café mientras desgrana recuerdos. Santiago Rivera tiene 34 años. Es de Vigo. Cuando está en Madrid vive en una pensión de la calle Preciados. Gasta poco, 35 euros al día para dormir y comer. Es una estatua humana; sobrevive gracias a su capacidad de permanecer inmóvil, a la verosimilitud del personaje. Interpreta un Jesús plateado con corona de espinas y una cruz a cuestas que pesa casi diez kilos. Cuando le pregunto qué quería ser de mayor, responde: “Libre”.
Así empieza el reportaje que escribí en junio para Tinta Libre sobre las estatuas humanas. Me llamó la atención el personaje de Rivera, su perfección. Hablamos en un café junto a José Manso, que interpreta un borracho metalizado. Parecía un reportaje costumbrista sin sorpresas. Quería saber por qué eligen un determinado personaje, cuánto les cuesta caracterizarse, cuánto ganan al día, qué dicen los viandantes que se cruzan con ellos.
La sorpresa llegó cuando me dijo que Alex de la Iglesia había rodado una película con su personaje como protagonista. Estaba quejoso porque nunca habló con él; no le comunicó nada, ni le ofreció un acuerdo, algo. Otro chico que hace de Jescrucristo semidesnudo le pidió permiso antes de montar su escenario en la calle Mayor. A Santiago le gustó el gesto.
Hablé con el cienasta, me pidió el teléfono de Santiago y le ofrecieron colocarle en los créditos e invitarle al estreno. No han cumplido. En los créditos hay un agradecimiento a las estatuas de la Puerta del Sol en general, no a Rivera en particular. El no tiene el copyright de Jesucrito (es del Vaticano) ni siquiera en su versión metalizada, pero ahora está jodido porque parece que es él quien copia, quien trata de aprovecharse del director de cine. Es una batalla desigual e injusta.
Hoy me ha llamado a casa. Dice que Alex de la Iglesia le ha pirateado el personaje, su modo de vida. No es solo el dinero; en el disfraz está la dignidad, el respeto.
Este es el resto del reportaje. Culego también las fotos que hice, para que no haya dudas de quién es el original.
“Todo ha cambiado con la crisis económica”, asegura Manso; “la gente nos ve como mendigos, no como artistas”. Se colocan juntos en su escenario imaginario porque así llaman la atención. Rivera se tortura con el reconocimiento; la mayoría pasa sin volver los ojos y cuando alguien se detiene es para hacer fotos. “No es el dinero; quiero que admiren mi trabajo. Tengo que sentirlo”. Esa necesidad es debilidad, un rasgo artístico.
Jesucristo resulta un papel arriesgado; más en tiempos en los que la escasez agita el odio. Lo eligió para una Semana Santa hace dos años porque le gusta el mensaje que transmite. Hoy se le ha encarado un hombre maduro de ideas fijas: “Eres un estafador. Dices que el eres el rey de los pobres pero estás pidiendo”.
“En Niza una veintena de jóvenes me lanzaron monedas de dos euros”, asegura Jesús. “Tuve suerte: ninguna me dio en la cara. Eran un pelotón de fusilamiento. Las personas que miraban se apresuraron a recoger el dinero para llevárselo a casa. Aquí aprendes a conocer el alma de la gente”.
Tardan media hora en maquillarse, en prepararse. Esta vez se pintan en la calle Preciados aprovechando la sombra de los toldillos. Los peatones pasan ante el camerino callejero como si fuera un tiovivo, curiosean sin saber quiénes son los que giran, ellos o los artistas. Ser estatua arrastra soledad.
A Santiago le encanta Ginebra, su ciudad favorita; allí siente esa admiración que tanto ansía. “El trabajo funciona mejor en el norte de España y en el extranjero. En Roma siempre nos tratan muy bien. No es que me disguste Madrid, es que es mejor en las ciudades pequeñas, sin tanta competencia”, dice Jesucristo. Manso, que presume de madrileño, también prefiere trabajar fuera. “En París está todo regulado, pero si vas a un barrio, la policía hace la vista gorda por una hora o dos y te soluciona el día”.
El borracho está enfadado con Alex de la Iglesia. Dice que ha rodado una película centrada en el personaje del Jesucristo de Rivera. “No ha hablado con él ni le ha pedido permiso”. Rivera escucha cabizbajo con uno de sus cigarrillos de liar entre los dedos. “Ni siquiera le ha cambiado el color plata. Lo ha copiado sin más. Hay otro Jesucristo en la zona. Lleva las piernas desnudas. Vino a verme, quería saber si me molestaba”, explica Santiago Rivera.
El director bilbaíno asegura que la productora contrató a algunos y que habló con muchos de los artistas que se colocan en la Puerta del Sol. “No es un papel sobre él; es un atracador que se viste de Jesucristo. Reconozco que le he visto varias veces y eso me ha inspirado. No sé lo que pasaría, quizá no le encontramos en los meses anteriores y durante el rodaje. Hablaremos con él para arreglar el asunto y meterle en los créditos si quiere”. Santiago reconoce que estuvo meses fuera de Madrid y se muestra encantado con la llamada del director: “Es un reconocimiento”.
Rivera y Manso trabajaron en la Puerta del Sol durante el 15M. “Al principio había buen rollo, todo el mundo estaba feliz con la protesta; notábamos ese optimismo”, asegura Manso; “después decidieron quedarse demasiado tiempo y perdieron el apoyo de los comerciantes. Percibimos el cambio. Al final, en las asambleas se decían muchas tonterías”.
La crisis afecta a la expresión de las personas; van cabizbajas, ausentes, pensando en sus cosas, no hay alegría. Sol es un escaparate con los personajes del lumpen: carteristas, drogadictos, chaperos, buscamalavidas. La gente cree que las estatuas no escuchan y lo escuchan todo.
En una buena jornada recaudan cerca de 50 euros. Pero los buenos días son escasos. “Pasan curas y monjas. La mayoría no dice nada, algunos se enfadan. Un día se paró uno que venía de las islas Solomon. Había estado allí de misión 30 años. Daba vueltas alrededor. Me di cuenta de que era el mismo por los zapatos. Me dijo que le gustaba lo que hacía. Que verme había alegrado su día”, asegura Rivera.
El borracho reprocha la juventud de Jesucristo, que con 34 cumplidos ya escapó al destino del original y vive una vida propia. “Está todo el rato con el rollo de que no nos respetan y no para de moverse. Si se quedara quieto un buen rato sería la leche porque es muy bueno. Ha ganado premios”.
La crisis transforma las ciudades, las enloquece. La Puerta del Sol es también un vaivén de novios y novias, turistas, ligones, manifestantes y predicadores de la nada. A veces se oye un buen músico o se forman corros alrededor de un mago negro que hace malabares con el racismo. Los muñecos de Disney que pueblan el lugar son peruanos; los hombres que hacen de Alien, búlgaros; los compradores de oro, colombianos, cubanos, dominicanos. Los soldados en posición de ataque -un portugués y un brasileño- regresaron de Lisboa, de ponerle claveles a sus fusiles.
Ese Madrid paralelo y multicultural es un reflejo de la sociedad sin memoria, se duele de los mismos problemas, la misma insignificancia. Arrastrados por el hundimiento, todos, ciudadanos y derechos sociales, se transforman en estatuas tan invisibles como Rivera y Manso. Todos sobre un escenario sin saber quiénes somos en verdad: personas o máscaras.
[…] A Santiago Rivera le han pirateado el personaje http://www.ramonlobo.com/2013/09/28/a-santiago-rivera-le-han-pir… por Ratoncolorao hace nada La sorpresa llegó cuando me dijo que Alex de la Iglesia había rodado una película con su personaje como protagonista. Estaba quejoso porque nunca habló con él; no le comunicó nada, ni le ofreció un acuerdo, algo. Otro chico que hace de Jescrucristo semidesnudo le pidió permiso antes de montar su escenario en la calle Mayor. A Santiago le gustó el gesto.Hablé con el cienasta, me pidió el teléfono de Santiago y le ofrecieron colocarle en los créditos e invitarle al estreno. No han cumplido. etiquetas: santiago rivera, las brujas de zurragamurdi, alex de la iglesia negativos: 0 usuarios: 1 anónimos: 0 compartir: window.___gcfg = {lang: 'es'}; $(function () { $.getScript("https://apis.google.com/js/plusone.js"); }); sin comentarios cultura, cine karma: 20 GA_googleFillSlotWithSize("ca-pub-8059464308672801", "link-468×60", 468, 60); […]
Lo de Alex de la Iglesia no me extraña un pelo.Sé que no soy objetivo,hay tipos que de entrada te cáen mal y luego,con el tiempo ó cambias de opinión o profundizas en ella.Con el susodicho me pasa lo segundo.Ni me hace gracia su cine,él mucho menos…un poco como Almodovar – en cuanto a imágen – porque su cine,las antiguas,rebosan inteligencia y ternura.
Interesante y humano todo los que decís tú, Rivera y Manso. Desde aquí mi reconocimiento a estas personas que sí, muchas veces nos pasan desapercibidas, las vemos como parte del paisaje. Creo que a partir de tu post valoraré de otra forma a estas estatuas humanas, no sólo por su estética e inmovilidad.
Hola!
Gracias por traer este artículo que nos refleja tan claramente dónde se halla la libertad y lo “trabajoso” que es llevarla a cabo.
El cine de Alex de la Iglesia suele gustarme, también me gustaba cuando le hacían alguna entrevista al propio Alex. Si esa queja le ha llegado, podría haber aprovechado la oportunidad para practicar lo que suele decir.
Vaya reportaje chulo, eso es periodismo, enhorabuena.
Que gran trabajo, es un reportaje muy bueno. GRACIAS Y FELICITACIONES!!!
menos mal que hay periodistas como Ramon Lobo, he intentado de todas formas dar a conocer esta noticia que es información, saber y no lo que nos cuentan, que es otra realidad que les interesa a ellos, por eso quiero agradecerte Ramon la ayuda prestada desde tu trabajo que se siente que te gusta tanto como a mi el mio, eres muy bueno escribiendo, muy bueno pero mejorpersona, un abrazo y gracias.
Señor: Ramon Lobo Solo puedo volver a pedirte disculpas por que no fuy nada justo y realmente me comporte como un “patan”. Pero como bien dices en tu magnifico legal, y lo mas importante Sincero reportaje, yo me equivoque por ser tan jodidamente impulsivo.Gracias por aceptar mis disculpas y ademas ser un caballero y traerme la revista a Sol. Gracias y perdon de nuevo.Un cordial saludo pero con un fuerte abrazo………………………………………:))
Magnifica reportagem sobre as estátuas vivas, arte que tive o prazer de iniciar na rua já lá vão 27 anos. Também a mim roubaram muitos personagens e ideias.
Ser estátua viva é também ter perdido o medo e ter a força de vontade necessária para seguir adiante, com consciência, com sentimento e com arte.
Saudações desde Lisboa com um abraço
António aka Staticman (el hombre estátua)