Debatir sin voz contamina menos
Thursday, 19 de July de 2012 por Ramón
Sigo por televisión el debate en el Congreso. Lo hago sin volumen. Es una medida higiénica porque no soporto el tono metálico de la voz del ministro Gafe, ese que cada vez que abre la boca dispara la prima de riesgo, que a partir del 7% se llama prima de peligro, y me baja la libido. No me pierdo nada porque no hay debate, solo escenificación de unas medidas ya tomadas por un partido que tiene la mayoría absoluta. Además, resulta emocionante verles allí, disputándose la nada.
El ministro Gafe -protagonista de la matinee en ausencia del Presidente Ausente- ha movido las manos con determinación alrededor de una corbata rosa y unas gafas verdes. La mezcla de colores muestra poco gusto y menos tacto. Son contradictorios con las medidas tan duras adoptadas, de rigor mortis, de luto riguroso. ¿Pretende colarnos mensajes subliminales? Mundo rosa, brotes verdes. Zapatero ya tropezó en esa piedra multicolor y por ahi sigue, miope, gateando por los campos de Cañizares, el enemigo público número uno de Rouco Varela.
En sus réplicas con los socialistas (término un tanto exagerado en su caso), la mímica del ministro rosayverde proyectaba titubeos, miradas al tendido en busca de aire y apoyo y un exceso de jarraneo al encontrarlo, un “no sabe con quién está hablando”. Rubalcaba no lee discursos escritos por otros; solo sigue sus apuntes. Tampoco lee Rosa Díaz ni Cayo Lara. Los tres improvisan, o dan esa impresión esencial en teatro. El primero, con y sin voz, parece más consistente que Díaz, que se preocupa en exceso de la pose, del juego.
No soporto a los políticos que leen hasta las toses. Tampoco a los curas (solo en algunos funerales; las demás misas me las salto): siguen el misal al pie de la letra, inseguros, como si Satanás anduviera enredando con las comas. ¿No han tenido tiempo de aprendérselo? Y de creérselo.
El debate de esta tarde en el Bundestag lo escucharé con voz, aunque no entienda. Los diputados alemanes deberían aprobar el plan de rescate a España (perdón, línea de crédito a los bancos). Estoy seguro de que Merkel y sus ministros darán más explicaciones en Berlín sobre los recortes, ajustes y demás jodiendas (¡ups! Se me ha escapado un fabrismo) aplicados en España que los ofrecidos hasta ahora por el Gobierno de Rajoy, tan parco en casi todo.
Ver sentados en la presidencia del Congreso a Jesús Posada y Celia Villalobos, tan partidistas en sus intervenciones, cortes y comentarios, es otra prueba de lo que sobra. Sobre los del síseñorloqueustedmande, los profesionales de la obediencia.
La culpa es nuestra. Lo que decía Platón: “El precio de desentenderse de la política es el de ser gobernados por los peores”. Estamos a tiempo de corregir.
Estimado Ramón, perdón por la corrección, pero entiendo que el efecto del debate — no me extraña en absoluto — es doble: por un lado te quedas y me quedo lívido … por otro tu pulsión sexual — libido — y la mía evolucionan de manera inversamente proporcinal a la evolución de la prima — de riesgo — y a la mezcolanza ética y estética del ministro Gafe … Un abrazo y sigue escribiendo las reflexiones que yo no sé formular …
anoche en la plaza de santacruz
la caravana de la alegria
tomo la plaza y los niños se refrescaron en la fuente del rebaño.
limpia, quiero decir con cloro.
un vecino llamo al 91 ;
que habia pornografia infantil en la plaza.
llego la policia… mientras yo, con ramonlobo.
que es lo que pasa?
el niño de la caravana yuri apenas anda,
ya acusado, en la plaza, las cinco, toca corrida.
tututuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu…….
suenan moviles tambores de guerra.
guerra que atrapa conciencias desmenbradas y paciencia…
unirnos? separarnos? cada cual en su camino,
con la alegria de la caravana,
de sentir cada estrella, cada astro infinito, la geometria sagrada,
la musica de 432 hz reivindico.
el teatro… el circo… lamour… e las ganas de concretizar
ser efectivos, practicos, adelante caravana¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
estamos en nuestro propio viaje, confrotables, sin comodidad.
elegid el sitio. protegeos del relente este, tan bravo.
las pistolas todas se las hemos comprado…
para ellos, coño, que se maten de una vez,
y que hagan el ruido infernal que les salga de los cogones.
cogonesssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss.
pa cogones los nuestros. que ovarios ya somos, leñe¡¡¡
namaste amor teamooooooooooooooooooooooooooooooooooo
Yo no puedo verlos, me sacan de mis casillas, no hay ni un sólo día que no nos traten como a niños, además como a niños tontos, amenazándonos con algún castigo. ¿No hay en este país nadie con talento? Y el jefe sin aparecer, esto debe dar mucha confianza a los mercados.
Hay que corregir y hay mucho trabajo a realizar. Ya hay partidos de izquierda, pobres, que organizan debates y movilizaciones, pero a la hora de convocar cuatro y el cabo. Siguen ahí en el empeño pero a corto plazo no veo partidos con convocatoria y el Psoe decepcionó tanto en su última etapa que aquí nos dejó, dolidos, impotentes, con ganas de participar, pero nos quedamos en eso, de momento 😀
De vuelta a casa tras un paseo por la calle de Alcalá, desde Neptuno a Sol. Esta noche hay podría ser el inicio de algo nuevo frente a la mezquindad y la codicia. Veremos. Buenas noches y muy buena suerte para todos.
Efectivamente, Platón tiene razón.
Saludos…
Tengo la impresión de que ahora los ” sudakas ” vemos una película ya vista en nuestros territorios durante los liberales fondomonetaristas 90s. Circula por acá la palabra ” eurakas “. Sorry.
Me encanta cómo están llamando en algunos foros al que llamas Ministro Gafe:
Tontoro.
Me parece una definición perfecta para un infeliz que demuestra sus carencias a cada instante que se sienta ante un micrófono -aunque eso define sin excepción a todos y cada uno de los ministros de este gobierno, el caso de este señor es especialmete sintomático de la mediocridad de la casta, sobre todo cuando aprieta los dientes, colérico, cuando carece de argumentos para responder una pregunta y convierte su frustración en cólera-.
Tristísimo ese hombrecito gris que cada vez que abre la boca genera un titular en The Economist o The New York Times que nos hunde más y sube la prima de riesgo. De ahí que Tontoro sea el mejor apodo que lo defina.
Pd: Es Rosa Díez, con “e”, no Díaz, que mira que lleva años en política y tiempo has tenido de leer -y escribir- su apellido miles de veces.