Saber despedirse es un arte
Saturday, 6 de February de 2010 por Ramón
Saber despedirse es un arte; saber morir, otro. Siempre imaginé que el final de la vida era muy parecido a esta genial escena de All that Jazz y que al otro lado estaba Jessica Lange vestida de blanco. Deberían aprender los exégetas del infierno y su calores: la decoración es esencial. Mejor una mujer hermosa y elegante que un tipo de mal carácter, cuernos y rabo. La mayoría de las religiones utiliza la muerte como amenaza para evitar deserciones. No existe una educación para aprender a morir porque tampoco la hay para saber vivir. Se agitan banderas de libertad y se nos niega, por ejemplo, el derecho a una muerte digna, que es lo que significa eutanasia. No es obligatorio estar vivo a cualquier precio. No todos tienen que estar deslumbrados por la ilusión de vivir. El cuerpo, con sus males físicos y mentales, no es un rehén de las ideologías.
Eres un filósofo, ¡me encantas!
Estoy contigo, no enseñan muchas cosas pero se dejan las esenciales, entre ellas: aprender a vivir y a morir. En fin…
Un saludo y buen viaje (no te digo que te mueras, ehhhh!!) a Puerto Príncipe
Soy mujer, me da verguenza pertenecer a vuestro género, me refiero a la mayoria que dejáis comentarios en el blog de Ramón,¿es que no os leèis por Dios? dais pena, parecéis un montón de solteritas babeando por Ramón, ¿pensáis con esos moditos engatusarlo?, me recordáis a mi abuela, no habéis avanzado nada, no os podéis imaginar el daño que esto le hace a la imagen de la mujer.
Carmela, se cree el ladrón que todos son de su condición. ¿Un hombre no te puede gustar más allá del ámbito sexual? ¿Siempre que le dices a un hombre que te gusta algo de él ya quieres follar con él? ¿Si comentas en este blog entonces es que no tienes pareja ¿Y si soy lesbiana? ¿Los hombres que comentan son gays, entonces? ¿y dices que te damos pena? Me reservo lo que tú me das a mí porque no merece la pena ni decirlo.
Saludos, Montse
PD: Ramón, según algunas, debes ser un picha brava porque vamos…. jajajaja
Montse, si no todo lo que buscáis en un hombre es follar ( por cierto, no me esperaba ese bocavulario de ti, tú tan “espiritual y filósofa”), si pescarlo y en el mejor de los casos casaros con él , o mejor dicho, que él se case con vosotras. Y de ladrón de la misma condición nada querida, porque yo ya que os gusta tanto las citas por falta de ideas propias, tomaré prestada una de Scarlett O´hara´, “mientras que mis hermanas siguen solteras yo me he casado tres veces”,( dos en mi caso).
Carmela:
1) Las espirituales y filósofas también follamos, ¡qué tendrá que ver la velocidad con el tocino! Y la palabra la puse con toda la intención. Y a ti tan liberada y moderna que te has casado tres veces (¡oh, qué gran mérito!) no debería escandalizarte tanto. Si te escandalizó lo siento, cámbiala por otra que te suene mejor o te guste más.
2) Eso de pescar y querer que se casen contigo y esas cosas son tan machistas y retrógradas que ponen de manifiesto, nuevamente que se cree el ladrón que todos son de su condición.
3) Di lo que te dé la gana, no pienso contestarte más.
Ciao, Montse.
Espero tus artículos con expectación. Suerte y salud.
¡Carmeliya, sos clarividente! Uno pensando que este era un blog de pensamiento y sugerencias ramonlobonianas, un blog con el que te vas encariñando y acaba haciéndose imprescindible cada mañana (¡porque Ramón lo vale!) y resulta que no, que es algo mucho más tenebroso.
¡Gracias, oh Carmela! Me has hecho ver la luz. Resulta que Ramón es el nuevo Charles Manson, seguido ciegamente por una turba de “incondicionalas” que besan el suelo que pisa, y anhelan el matrimonio, (ser señoras de Lobo), y de incondicionales que, tal vez no estemos tan deseosos de casarnos con Ramón, pero que obedeceremos acríticamente todas sus consignas. Ahora que lo pienso, me acuerdo también de una película estupenda, “Acción Mutante”, en la que el protagonista, llamado, oh casualidad, Ramón (¡gran Resines!), manipulaba a su antojo, para mejor llevar a cabo sus planes diabólicos de dominación interplanetaria, a una tropa de tullidos, judeomasones, filocomunistas, macarras y freaks.
Así que, en honor a Carmela, la clarividente, reproduzco la arenga con la que Resines enfervorizaba a su tropa en la película de marras:
“¿Quién creéis que sois?, ¿habéis olvidado las tres grandes preguntas?
¿Qué erais cuando os encontré?
Éramos basura, desecho de hospital
¿Quién os sacó del arroyo?
¡Tú, Ramón!
¿Qué sois ahora?
¡Mutantes!, ¡mutantes!, ¡mutantes!
¡Somos soldados del ejército mutante y vamos a ganar la guerra!
La sociedad nos trata como mierda ¡y ahora les vamos a dar por el culo!
El mundo está dominado por niños bonitos, por hijos de papá…¡Dios!, ¡Basta ya de mierdas light!
¡Basta ya de colonias, de anuncios de coches, de aguas minerales!
¡No queremos oler bien! ¡No queremos adelgazar!
¡No!
Sólo quedamos nosotros, amigos míos.
Todo el mundo es tonto o moderno.
¡Somos mutantes!
No pijos de playa ni maricones diseño.”
No te dito nada más, Carmeliya, que en este blog hay que ser “fisno”, respetuoso y civilizado. Pero te has lucido, hija mía.
Con o sin permiso de Carmela, lo encuentre o no lo encuentre sospechoso, quedo, como el resto de “incondicionalas” e incondicionales, atento a lo que nos cuente Ramón desde Haití.
¡Qué mal llevamos que nos contradigan cuando estamos acostumbrados a movernos en clanes donde existe el pensamiento único y el proteccionismo de sus miembros, como hacían miles de año nuestros antepasados! Lo que Ramón necesita son individuos autónomos, -¿conocéis qué es eso?- con libertad de pensamientos, no seguidores de un Guru, al que hasta la defecación que hace el maestro le parace una obra de arte.
Lo que Carmela ha hecho no es más que opinar y defender una postura que la actitud de algunas personas que aquí comentan ponen en peligro y no es más que la de la dignidad de la mujer, y añado yo, la de la persona, (va por tí Alfonsito, ya que te permites, tan educaditos que sois, la falta de respeto de llamarlas Carmeliya, sin conocerla. Ya que seguís con las citas (se ve que os cuesta razonar por sí mismos) hay va una popular por mi cuenta: Hechos son amores y no buenas razones. Aplicarosla los que tenéis esta actitud. Y perdón Ramón por haber tenido que entrar en esta polémica en tu (para mi) respetado blog, pero actitudes como estas no estoy dispuesto a tolerar, como no comulgué cuando lo intentó el “abuelo”, a quien dios guarde en su gloria. Un saludo para todos, incluso a los que no les va a gustar mi comentario.
Derpolingano: ¿Lo que Carmela ha hecho ha sido opinar y defender una postura? Yo más bien diría que se ha limitado a insultar, de hecho yo intenté argumentar y razonar en mi primera respuesta y ella no ha contestado a nada. En fin, encima una tiene que quedar por heterónoma, abducida e intolerante. ¡Manda güevos!
No hay salida, o busca desesparadamente casarse y que la mantenga (en caso de ser mujer y eso según Carmela) o es una persona que no sabe pensar por sí misma, que sigue con fe ciega al “supuesto genio”, totalmente manipulada y perteneciente al clan del pensamiento único. ¿Y que es, según tú, ser autónomo/a?, ¿llevar la contraria a todos/as y en todas partes?
En fin, sé que no debería contestar pero es que mi sangre caliente me hace siempre entrar al trapo.
Ramón, te pido disculpas por estas discusiones que nada tienen que ver con el post y si lo consideras oportuno (yo creo que estaría bien) borra mis tres últimos comentarios que nada tienen que ver con el contenido de este post.
Saludos, Montse
Alfonso, verás que te llamo por tu nombre y no con diminutivos peyorativos, se ve que te has puesto un poco nervioso; yo solo me refería a algunas de las féminas que entran en este foro, pero no me extraña que contestes porque para eso eres el adulador mayor del reino. Me paseo por muchos blogs y en ninguno hay tanto seguidismo como en este; ni sugerencias, ni críticas, ni debate, solo un chorrear de babas, me refiero a gente como vosotros, por supuesto, no creo que esa halla sido la intención del autor de este blog. No sé por qué para defenderos tenéis que recurrir a Ramón, parecéis niños buscando la aprobación del profe, yo no he dicho que él sea un abducidor de mentes, vosotros veníais así de fábrica. Por último, te rogaría que acortases un poco tus comentarios, son verdaderos ladrillos, no creo que halla nadie que los lea enteros, ¿pretendes usurparle el blog a Ramón, o lo utilizas para lucirte?, un poco de respeto para tu lider. No pienso entrar más en esta polémica, seguid con vuestra actitud y que os aproveche.
Carmela, me encanta tu “bocavulario”.
Alfonso, me encanta comprobar tu falta de argumentos, eres un soberbio franquista. No es como lo haya escrito Carmela, sino lo que te ha dicho. Y o lo ratifico, eres un coñazo.
O sea, que una mujer, por afirmar que está de acuerdo con lo que escribe quien regenta un blog, incluso por manifestar que admira a quien administra ese blog, es sospechosa, por real decreto del binomio Carmela-Derpolingano, de buscar la sumisión matrimonial.
Lo de tu amiga Carmela no ha sido una opinión: ha sido un exabrupto y un sarta de memeces. Espolvoreada con ortografía preescolar. La solidaridad que le muestras, pareciendo persona algo más alfabetizada, supongo que es un peaje a la amistad o a la convivencia o a lo que sea (ni lo sé ni me importa). Ya somos un poco mayorcitos para andar pidiéndole socorro al primo de Zumosol, ¿no os parece a los dos?
En el tiempo que llevo leyendo este blog (y a su historial me remito), lo de expresar opiniones contrarias a las de Ramón Lobo, con timidez o con bastante energía, es casi cotidiano. Porque eso sí son opiniones. Opiniones, no presunciones estúpidas sobre las motivaciones o la biografía de los demás. Opiniones, no insultos. Opiniones, no provocación. Y si algo habéis demostrado los dos en ese hilo, los dos, es que no entráis aquí con ánimo de disensión, que siempre es legítimo, sano y deseable. Vuestro único ánimo es la provocación, por la provocación. Vamos, al nivel de la bronca en un chat de adolescentes, actitud que fuera de contexto (del contexto de chat para adolescentes), en cuanto a coñazo, creo que es coñazo de tamaño no inferior a mis intervenciones.
A mi no me puedes, cachorrito de niño pijo engreido; se te ve muy nervioso cuando se te contradice. Aquí los únicos que habéis sacado los pies del plato sois vosotros dos; es más, el único que ha salido en tipo duro has sido tú, defensor de lo imposible. ¿O tal vez eres una nena que se ha visto reflejada en la crítica de esta mujer, que solo ha defendido lo que las mises y algunas ogtras mujercitas se encargan de estroperar? Todo el mundo no ha tenido la suerte de tener unos papaitos que les pague una carrera, para luego tener la boquita que tú tienes. Y en cuanto a lo de amiga, so “bruja Lola”, ojalá la pudiera tener, mujeres como esta son las que necesitan el mundo. Conmigo no puedes, con buen huesos has topado.
Dicho lo cual, creo que es posible que sigamos por aquí, uno y otros, sin embestirnos. Pensemos lo que pensemos. En los “realitys” de la telebasura está muy valorada la figura del killer/destroyer, papel que desempeña con singular maestría la inefable no-viuda de un no-torero. Yo creo que, sobre todo si no te pagan una pasta gansa por enseñarle los dientes al personal, esas formas deberia guardárselas uno, como la pura mala uva, en el bolsillo más profundo, en el más inaccesible. Porque como espectáculo es bastante desagradable, y bastante poco favorecedor.
Derpolíngano, es que yo no creo en la bronca. Me aburre más que ninguna otra cosa en este mundo. Y si es bronca a distancia, bronca por internet, con perfectos desconocidos, ya ni te digo. Uno puede circular por la vida sin desviarse ni un milímetro de sus presupuestos ideológicos, de su conciencia, de su manera de ver las cosas y hacer perfectamente compatible esa fidelidad con el respeto. O no puede. Cada uno elige. Que tengas buena tarde.
¡Qué bien te expresas, pero qué vacío de contenidos! Lo peor es que estamos fastidiando a a los demás que, al contrario que tú, niño “sobresaliente” no han entrado al tema. Se ve que “el que ajos come, etc”, volvemos a las citas prestadas. Aplícate el cuento, y corta ya el rollo, aunque sólo se a por Ramón, que debe estar muriendose de verguenza en Haití. Calladito estas mejor.
Bueno Derpolígano, no te entiendo en absoluto. De verdad, me resultas más incomprensible que la teoría de las mónadas de Wilhelm Leibniz, más ajeno que la teoría de supercuerdas. Si, en , lugar de encontrarnos en el blog de Lobo, coincidimos en el de Punset, aumentarían las posibilidades de acuerdo entre nos. Sólo acierto a interpretar que estás muuuuuuuuy cabreado; es lo único que entiendo. No sé si es cabreo ocasional o vives en estado de cabreo perpetuo. Pero si necesitas un punching ball, no me presto. Ni se prestará ninguno de los que asisten silenciosamente a esta pintoresca discusión. Que, por mi parte, discusión no es.
Alfonso, a mí sí me gustan tus comentarios, unos más que otros y quizá no todos, pero vamos, me gusta leer tus comentarios. Por lo demás, a veces es inútil argumentar con aquéllos y aquéllas que no quiere argumentos sino ataques personales. En fin… Ah! No sé nada de ti, pero te habrás dado cuenta de que te estoy echando los tejos, que quiero pescarte. Eso sí, sólo si falla la tirada de tejos a Ramón. Jajajaja.
Saludos, Montse
Montse, aunque llevo casi veinte años fuera del escaparate y me siento asquerosamente monógamo, por supuesto anhelo casarme tanto contigo como con Ramón. No sé en qué orden, pero siempre por la Iglesia. Si no, es concubinato.
“Saber morir es un arte” y “saber vivir” tambien.
Hay una frase que mas o menos dice, “el hombre es el y su circunstancia”. Nuestras historias son diferentes y por eso actuamos de forma diferente. A veces, comprender esto se nos hace dificil, pero la vida seria mas facil si aprendiesemos a ser un poco mas flexibles.
Buen viaje Ramon.
Un saludo cordial.
No soy de las que suelen dejar comentarios en ningún blog que visito, pero hoy, después de la polémica suscitada en éste, me deciso a intervenir para dar mi punto de vista. Confío en que se respete.
La reacción que algunos habéis tenido al comentario de Carmela (acertado o no, eso sería otro debate), sin entrar a rebatirle con argumentos válidos que lo desmonte, y sí con decalificaciones bochornosas sobre su “ortografía” (no se puede caer más bajo, y ¿si fuese coja, qué le atacarías Alfonso, por su defecto físico, no será que ella no utiliza correctores ortográficos como tu?, acordaros que dos premios nobel lo han sido, aún con problemas de lenguaje) no hace más que calificaros.
La opinión de esta mujer la veniamos compartimos otras muchas personas, lo que ocurre es que sólo ella ha sido capaz de atreverse a pronunciarse, y lo que menos entiendo es a qué viene la intervención de Alfonso en defensa de Montse, ya es habitual este tipo de actitud en él, no hace mucho también lo hizo en defensa de Ramón, como si él por si solo no se bastase.
Saludos a todos, y no penséis que porque estamos silenciosos, otorgamos.
Leticia, no comparto absolutamente nada de lo que dices y además puedes estar segura que no eres la única persona en este mundo que puede prescindir de los correctores ortográficos. Que, por otra parte, crean muchos más problemas de los que resuelven, como sabe cualquiera que haya tenido que desactivar uno de esos dispositivos infernales, que saltan insidiosamente donde no deben. Sigo sin entender por qué Montse y otras personas se hacen sospechosas de no se sabe bien qué por decir que les gusta este blog y que les cae bien Ramón. Me encanta la dulzura con la que se expresa siempre Montse. Tal vez porque, con los años, con las experiencias, cada vez soporto menos a la gente agria. Es más, gracias a que existe un porcentaje no desdeñable de personas que van por la vida con la actitud de Montse, el mundo no es del todo inhabitable.
Discúlpame, desconozco todavía mucho el mundo de los blogs y sus códigos no escritos de comportamiento. Confío en que uno de ellos no sea el autismo. Vamos, que si a alguien que acaba de intervenir le arrean un estacazo que estimas injusto y desproporcionado, no es procedente terciar. Como hacen los jugadores de hockey sobre hielo de la liga estadounidense, y hasta los árbitros, lo correcto en un blog, según interpreto de tus opiniones, sería dejar que los dos contendientes se den una buena somanta recíproca mientras los demás asistimos a la refriega en silencio, silbando y mirando al techo.
Otra cuestión que deslizas es la improcedencia de afear a nadie cuestiones como la mala ortografía, que equiparas, a mi juicio muy indebidamente, con discapacidades físicas. Leticia, por ahí acaba uno convirtiéndose en rehén de la “corrección política”, que es una manera de encorsetarse que me inspira aún más terror que los correctores ortográficos.
Mira, Alfonso, este va a ser mi último comentario; puedes seguir luciéndote si quieres. Siempre que intervienes lo haces tirando balones fuera y nunca entras en el fondo. A ver si me explico mínimamente. ¿Carmela mencionó algún nombre en su intervención? Entonces ¿por qué os sentís aludidos vosotros dos? ¿Lo hacemos nosotros? No será, tal vez, que os véis reflejados en esa crítica que ella hace? Lee si no la nueva entrada de Montse hoy: a la una de la madrugada, y la primera ¿es eso lógico? Lo que tu pretendes defender es indefendible, te pongas como te pongas, y creo que te pierde tu deseo de protagonismo; ¿Cómo puesdes criticar a Derpolingano por defendela, cuando, mucho antes, tu habias hecho lo mismo con Montse? ¿Qué queríais, despedazarla entre los dos y que los demás quedaramos callados? Como asegura Carmela, temo por el futuro de Ramón, de aquí a nada le usurpas el blog. No des más vueltas al tema, Alfonso, “la dulzura” que utiliza tu apreciada amiga nos lleva haciendo mucho daño al resto de las mujeres que luchamos por ser respetadas en esta sociedad machista, y que, según parece, tu te empeñas en defender. ¿Qué quieres a tu alrrededor, mujeres sumisas? Mujeres como Carmela, que no se amilanan ante agresiones verbales como las que tú le diriges, son las que mueven al país, no las encantadoras de serpientes. Reitero mis saludos.
Oigan, oigan, oigan, paremos el carro, por favor!!! En primer lugar, a mí nadie me ha defiendido de nada porque:
1) Que yo sepa no he sido acusada de nada, creo que era una acusación (más bien una sentencia) genérica no personal. Y si es personal diganmelo que me defienda en condiciones. Anda que no soy guerrera.
2) No necesito que nadie me defiende, soy lo suficientemente autónoma y capaz para defenderme por mí misma.
3) Desde mi primer comentario di argumentos y siempre respeté a todas las personas, incluso a aquéllas que ni a mí ni a otras mujeres nos respetaron. Y nadie ha refutado esos argumentos, han seguido con ataques personas a otras personas pero nada más.
4) Alfonso, me alegra que me veas dulce, pero te aseguro que peco justo de lo contrario. Lo que pasa que si te tratan bien es imposible no ser dulce.
5) Es recurrir a las faltas de ortografía no es un argumento en contra del contenido de lo que Carmela dijo sino un ataque a su persona. Ahora bien, tampoco nos equivoquemos, no es lo mismo recurrir al argumento de la ortografía que al de la posible discapacidad física. Una cosa es susceptible de mejorarse con esfuerzo y la otra no depende de nuestra voluntad.
6) Estoy perdiendo el tiempo tratando de argumentar en algo que no merece la pena por ser intranscendente ( o no, no sé, porque me indignó la visión machista que nos adjudicaron).
7) Me molesta que Ramón no se pronuncie porque aunque digan por ahí que no el que calla otorga.
8) Debería pasar del tema pero no estoy segura de poder hacerlo.
Hala, me voy a clase. Saludos, Montse
Montse creo que el sentido de esto que llaman blog sois vosotros, aquellos que leen y comentan. Prefiero debates con menos puñales, pero no impongo las normas porque creo en la libertad y en la sensatez de todos. Bueno, sólo una regla: nada de insultos. Si no me gusta el tono de la discusión, que no me gusta, es un problema mío, pero no voy a ejercer de censor. Y además tu, Montse, sabes defenderte muy bien. Me gustan los comentarios favorables y los críticos y me encantan las aportaciones de ideas, músicas, links o lo que sea. De alguna forma es nuestro espacio. Recuerdo, por si acaso, que el post iba sobre el arte de saber morir. Besos y abrazos
Leticia, yo ya he aclarado y confirmado que, tal y como sospecháis tú, Carmela y Derpolingano, el único objetivo de mi presencia en este blog es cercar, someter y obligar a contraer matrimonio conmigo, o con Montse, a Ramón Lobo. Aunque, a juzgar por la retahíla de mensajes de felicitación, que siguen a su entrada de hoy, los competidores y competidoras son muchos. No obstante, los derrotaré a todos.
Montse, ni con treinta años de entrenamiento intensivo conseguirías parecer una refunfuñona. Si eso es atentar contra el feminismo, a la porra con el feminismo. Respecto a la no intervención de Ramón en este amago de bronca, le he leído ya, a raíz de alguna otra subida de tensión anterior, que él no piensa pluriemplearse en su blog como moderador ni como bombero. A riesgo de caer nuevamente en la tan sospechosa adulación, me parece lo más correcto.
Montse, mientras escribía la intervención anterior ya ves que tienes el pronunciamiento de Ramón que solicitabas.
Por mi parte, asumo el tirón de orejas del administrador del blog y, de verdad, me comprometo a contar hasta diez mil antes de entrar a según qué trapos. La falta de experiencia bloggera es lo que tiene. Así que disculpas, aunque, sinceramente, sigo pensando que no ha habido por mi parte ningún insulto ni menosprecio.
Discutir es bueno. Tampoco es tan grave, Alfonso, incluso si se bordean o se traspasan los limites del buen estar, pero hay temas mejores. Los encontraremos, seguro.
Si callo un poco más, reviento, y lleno toda la estancia de vísceras. ¿Es culpa del creador del blog tener seguidores que no se merece? ¿Quizá es el momento de la autocrítica? Porque cuando una plataforma que, supuestamente, fue ideada para que la libertad de pensamiento y el enriquecimiento de ideas floreciera, algunos -y perdona Ramón en que insista- la han transformado en un trampolín donde lucirse diariamente, “fardando” de las muchas citas que recuerdan, de los muchos idiomas que dominan, de los incontables viajes realizados, etc., todo medallas, al estilo soviético, para ocultar la realidad que algunos padecen: la carencia de equilibrio personal. Todo es una lucha por impresionar al que viene detrás, si no, cómo se entiende lo reiterativo que son algunos con sus profesiones y sus estudios. ¿Si Montse fuera limpiadora de escaleras, o cajera del Día, crees que nos lo hubiera refregado? Pensaba que aquí encontraría relajación, falta de competitividad, pero no, observo que sigue siendo un trozo de calle, donde lo que más importa no es lo que seas, sino lo que aparentas. Me dá pena, de veras Ramón, tu blog me gusta (aunque en algunos asuntos tengamos diferncias en la manera de enfocar el tema, que no en el fondo) y pienso seguir leyéndolo. A pesar de la contrariedad pasada (nunca es una ofensa llamar al alguien por su nombre, Alfonso es un niño engreido y, después de la respuesta a Leticia, machista), tienes buena gente siguiéndote. Felicidades en este nuevo aniversario y que situaciones como estas solo te sirvan de estímulo para seguir fomentando en lo que crees: la libertad que algunos quieren mediatizarla. Disculpa y un fuerte abrazo.
¡Que no soy un engreído, me cago en tó! Si estuvieras en Madrid, que intuyo que no, te invitaba a unas cervezas para que vieras hasta qué punto soy engreído. Y el de los grandes viajes y alardes no seré yo, precisamente. Cinco años, cinco, sin salir apenas de esta ciudad y sin vacaciones (bendiciones del autoempleo). Venga, que se te pase la irritación, hombre. Si en algo te he ofendido os he ofendido a ti o a Carmela, reitero la petición de disculpas. Por mi parte no me doy por aludido, mucho menos por ofendido, con ninguna de las lindezas con las que me has obsequiado. Creo que no estaría de más que vosotros, sobre todo Carmela, le pidieseis también excusas a Montse, que creo que es la única que tiene motivos para estar molesta en este zafarrancho de andar por casa.
¿Qué he hecho yo para que sigan con ni nombre para arriba y para abajo? ¡Me estáis tocando los …! Que a mí no me tiene que pedir disculpas nadie, que no ofende quien quiere sino quien puede. Que yo protesté porque no me gustó la interpretación según la cual si comentas es porque quieres pescar a un hombre, que ya está bien.
Ramón, no te pedía que me defendieras, insisto, creo que sé hacerlo sola. Simplemente que te pronunciaras acerca de si tú compartías o no esa percepción que en teoría nos han acachado a algunas mujeres que comentamos. Pero ya da igual, me retiro.
Lo que más me molesta de todo es que me hagan pasar por machista, ¡madre mía! Para unos una feminista recalcitrante y para otros una machista. ¡Ay!
Saludos, Montse.
PD: Si alguien tiene algo contra las limpiadoras (que también pueden ser limpiadores) de escaleras o contra las cajeras (que también pueden ser cajeros) del Día es su problema, no el mío. Y ya está bien de seguir justificándome de nada. Ciao
Ciao también por mi parte. Por supuesto no al blog: solo a esta para mí tan didáctico intercambio de pareceres. No creo que franquista y esas otras cosas que me han dicho (lo de machista sí, un poquito, a ratos, y muy bajo control) me cuadren mucho, la verdad, pero un poco gilipollas sí que me voy a acabar sintiendo como no ponga un rotundo PUNTO FINAL. Por supuesto, con un saludo afectuoso dentro de lo que cabe (porque no creo nada de nada ni en los afectos ni en las amistades epistolares, internáuticas o como quiera que se llamen) a las otras tres patas de este banco surrealista.
Alfonso, te ha abducido Derpolingano, un claro ejemplo de troll: has acabado dándole explicaciones y discutiéndole sus insultos hacia ti. Eso te honra, pero él ha conseguido su objetivo: enfangar el blog.
Ramón, yo te sigo todos los días, aunque sexualmente no me pones. Qué se le va a hacer.
Hola, Enrique. Había cerrado mis contribuciones en este hilo tan desafortunado (otra vez mis excusas, Ramón). Pero te aseguro que Derpolingano no tiene nada de Troll. Lo digo después de echarle un somero vistazo a su blog (trabajadísimo, honesto, independientemente lo que puedas o no puedas compartir su perspectiva de las cosas). Cada uno tenemos nuestros activos y nuestras carencias. Derpolingano también. Yo diría que su fuerte, probablemente, no está en el sentido del humor, en la transigencia o en la flexibilidad. Yo escribí, en una intervención anterior, que le veía a su participación anterior intenciones exclusivamente provocadoras. Bueno, pues tengo que rectificar, después de la visita a su blog. Estaba equivocado. Y ahora sí, cambio y corto.
Alfonso, yo también había zanjado la polémica, pero la nobleza me desarma. Con 56 años uno puede equivocarse de la misma manera que otro con 8. Me alegra haberte encontrado y he de reconocer, a riesgo de volverme equivocar, que bajo esa piel respira una persona buena. No sé disculparme de otra manera; como en el amor, cualquier blandura me aterra. Confío en que las aceptes, y también Ramón, el que tan profesionalmente nos ha soportado, y el resto de la comunidad. Y como no os puedo hechar unas cervezas a todos, os regalo uno de los primeros poemas de Manuel Rivas:
ECOS
Nuestra guerra es vuestra armonía.
Nuestra derrota, vuestro paisaje.
Se nos caen las ojas.
Vosotros hacéis poemas.
Un fuerte saludo.
Hola, Derpolingano. Tampoco quiero que entren los violines para cerrar esta conversación, aunque yo la cursilería sí que a veces la reivindico, la ejerzo y hasta la sobreactúo. Confío que que sigamos leyéndote por aquí, en casa Ramón, y que este encontronazo no haya supuesto ninguna baja en este blog. Y te felicito, puedes estar seguro que sinceramente, por la manera en la que abasteces de contenidos el tuyo propio. De verdad que no me ha molestado nada de lo que me has dicho. Hasta me ha hecho gracia lo de que me hayas supuesto tan “niñopijo”, con la de miles de madrugones y decenas de miles de horas de trabajo que llevo acumulados. Un saludo y muchas gracias.