La máquina de multiplicar bobos
Wednesday, 25 de November de 2009 por Ramón
Tengo una amiga que asegura que no cabe un tonto más. Creo que se equivoca: en cada esquina hay uno nuevo esperando a ser contabilizado. Esta epidemia de estupidez es un fenómeno actual (¿75 años?) en el que la televisión desempeña un papel multiplicador. Basta que un bobo salga en la pequeña pantalla diciendo o ejecutando boberías para que de la nada broten cientos de imitadores mucho más majaderos que el primero. Los idiotas multiplicados por la televisión tienden a vestirse igual que el tonto original que les contaminó.
Existen dos tipos de estúpidos: la masa, que en esto de tontería también se dan las clases sociales. Ellos son la claque necesaria, la que ríe las gracias de sus jefes sin obtener beneficio alguno; la que espera delante de garitos adornados con unos especímenes prehumanos y en los que se sirven garrafones a precio de un whisky de malta; la que se coloca sin que nadie lo ordene en obediente fila media hora (o más) antes de que llamen a embarcar, sea avión o AVE… Y la élite.
La élite es más peligrosa porque tiene capacidad de camuflaje. Por eso a menudo sus miembros pasan por inteligentes. La política, el periodismo y la cultura son sus campos de actuación preferidos. Más que hablar o escribir impulsados por sus razonamientos han aprendido discursos ajenos de memoria que logran repetir de forma más o menos acertada. Muchos pasan tan desapercibidos que después de muertos se les recuerda por su genialidad.
Existe una fórmula infalible de descubrir a los que se camuflan: nombrarlos algo, situarlos al frente de una organización, la que sea, comunidad de vecinos, equipo de fútbol, partido político, sindicato, asociación o empresa. No tardarán ni cinco minutos de desenmascararse: todo tonto tiende a rodearse de tontos mayúsculos para que potencien su sensación de inteligencia. Y, sobre todo, no discutan.
No todo está perdido. Al menos hay esperanza estadística: en toda organización gobernada por bobos existe un 15% de capaces. (No funciona al revés).
De todos los tontos conocidos me gusta en especial Mister Chance, el personaje de Peter Sellers en Being There (Bienvenido Mr Chance, en catellano) Su estupidez resulta inofensiva y sirve para poner al descubierto un mundo gobernado por idiotas peligrosos. No sé de dónde diablos sacarían la idea para el argumento. ¿Un mundo de idiotas? No me suena.
PD Todos somos contaminadores y contaminados y tenemos campos y momentos de imbecilidad, a veces supina. En mi caso, en cuanto doy dos pasos fuera de la frontera del periodismo me siento bastante idiota.
Muy buena anotación, particularmente me identifico cuando dices:”No todo está perdido. Al menos hay esperanza estadística: en toda organización gobernada por bobos existe un 15% de capaces. (No funciona al revés).” y luego la parte con que cierras”Todos somos contaminadores y contaminados y tenemos campos y momentos de imbecilidad, a veces supina”, Saludos cordiales
Ramon !
Hoy me has hecho sonreir con tu post , gracias.
Salud
Que miedo, tanta idiotez suelta…son como armas de destrucción masiva…!
Un florilegio:
“En la viña del Señor, hay tontos que tontos nacen, y tontos que tontos son, tontos que lo parecen y tontos que no lo son”.
Inmenso. Cuánta verdad…
En palabras de Gracián: “Son tontos todos los que lo parecen y la mitad de los que no lo parecen”.
Si tantos pensamos que los tontos son los demás, ¿no será que los tontos somos nosotros y por eso no nos damos cuenta de la inmensa inteligencia que nos rodea?
Buenas tardes.
Mi nombre es Patricia Cristóbal y soy estudiante de periodismo. Estoy realizando un trabajo sobre el libro electrónico y me gustaría conocer su opinión al respecto.
Le dejo mi correo electrónico, por si fuera tan amable de encontrar cinco minutos para contestar a mis preguntas:
p.cristobal@alumnos.urjc.es
PD: Aprovecho para resaltar sus palabras “En mi caso, en cuanto doy dos pasos fuera de la frontera del periodismo me siento bastante idiota” con las que espero identificarme algún día.
Gracias por su atención.
Espero su respuesta.
La experiencia hace identificar a los semejantes
Si algunos bien pensantes;solo algunos; rezaran mas por la inteligencia de las personas que por sus riquezas o su salud tal vez ; solo tal vez; se solucionarían no solo estos problemas sino que no volverían a aparecer. Solo es un pensamiento. Pero me queda la satisfacción de leer su blog que trata de acertada manera estos temas y otros parecidos.
Lobo, eres afortunado, yo me siento idiota a ambos lados de la frontera. Salud.