Christian Poveda
Thursday, 3 de September de 2009 por Ramón
Pensando en Christian Poveda y en que no existen balas para callar la verdad.
Paco Ibáñez: La poesía es una arma cargada de futuro
Thursday, 3 de September de 2009 por Ramón
Pensando en Christian Poveda y en que no existen balas para callar la verdad.
Paco Ibáñez: La poesía es una arma cargada de futuro
Hola
sólo llevo una semana por aquí
gran blog
pero este video me ha emocionado
gracias
un saludo
Querido Ramón,
Por mucha admiración que puntualmente os pueda llegar a tener, no sé cómo hacéis para seguir dale que te pego, cada vez que pasa una cosa de estas. No sé si es que el simple ciudadano medio, como yo, tiene menos fe en las consecuencias prácticas de que la información “llegue” al ciudadano, de la que tenéis vosotros. Ayer, por ejemplo, vi el documental de Poveda. Muy bueno, sí, pero gracias a él las maras no dejan de matarse, ni su sociedad deja de ser la misma que las engendró, ni aquellas entidades que podrían hacer algo por solucionar el problema hacen un carajo, con o sin documentales denuncia. ¿Para qué filmar, entonces? ¿Tan sólo para que la bienintencionada denuncia se convierta en otro espectáculo más de ciudadanos apoltronados en el sillón, sobrecogidos, sí, pero completamente impotentes? No acabo de entender el sentido del sacrificio supremo, cuando no su utilidad no es medible pulgada a pulgada.
Como ser humano con ego, me gustaría haber firmado ese documental, sí, como haber firmado muchas de sus crónicas, como me gustaría haber vivido muchas de las experiencias de Ricardo o Julio. Pero morir por ello, no le encuentro el sentido, los muertos siguen muertos y los jodidos, continúan y continuarán bien jodidos.
¿Y qué es lo que pasa cuando uno ha tenido tanta suerte, y sigue vivo todavía? Que cuando va a recoger un distinguido premio a su labor periodística, y educamente se caga en la madre que parió a los sucesivos gobiernos de este país, denunciando la sistemática venta de armas grotescas a terceros países, los medios masivos lo ignoran y somos los cuatro pelagatos-leeblogs de siempre los que nos enteramos, los que ya teníamos los huevos negros de antes; el gobierno sigue a lo suyo y la inmensa mayoría verá la película o el granhermano, que pagar la hipoteca ya es bastante. Y don Gervasio se siente más miserable de lo que ya se sentía de antemano, y los que tenemos algo de vergüenza propia y bastante ajena, también.
Entiendo también que su profesión no necesariamente tiene por qué hacerse a partir del altruismo, pero otras veces me pregunto si no tienen ustedes una fe en el ser humano que yo no encuentro, u otras patologías.
Disculpe la extensión. Le envío un afectuoso saludo.
Si fueramos más que denuciaramos, como hizo Poveda , pero somos pocos ,aunque seamos mayoria los que pensamos y sentimos como el .En el mundo estoy segura ,la mayoria no nos gusta ,no queremos tanta injusticia ,pero….no nos comprometemos , hay quienes no tenemos medios y los que los tienen callan , y asi vamos , la minoria nos va ganando por que nos meten miedo y nosotros somos cobardes .Lo compruebas hasta en un medio de locomocion , que un solo personaje ( un ladron) deja que roben a un pasajero y nadie habre la boca…
Zulma
Dejar de informar nos daría todavía un mundo todavía peor.
Si dejara de creer, acabaría como el protagonista de El árbol de la ciencia, Andres Hurtado.
Cada uno puede hacer mucho a nivel local. Es muy injusto por parte de los que hemos tenido más suerte, rendirse.
Es terrible la muerte violenta de una sola persona. Pero ni Ramón Lobo, ni Gervasio Sánchez, ni ningún periodista mínimamente objetivo, riguroso y con su capacidad de lucha por informar y, seguro, esperar que algo mejore y no volver a tener que informar sobre lo mismo, se sienten miserables. Seguro que no.